Hemos empezado un curso poco habitual, lleno de incertidumbres y novedades. Pero lo empezamos con ilusión y con ganas de seguir encontrándonos cada día en nuestro colegio. Para ello, hemos debido aplicar algunos cambios en nuestro día a día que fomentarán la seguridad y la salud de alumnos, familias, profesores y personal no docente.
Las adaptaciones que hemos realizado a modo de prevención por el coronavirus son las siguientes:
Reuniones del personal al aire libre o en grupos reducidos.
Creación de un grupo nuevo por nivel en toda Primaria. Hemos adaptado algunos espacios que estaban destinados a talleres, juegos, idiomas, etc para albergar a estos nuevos grupos.
En secundaria hemos agrupado a los alumnos según su itinerario de optatividad.
En algún caso hemos tenido que habilitar espacios para funciones distintas de las habituales: hemos colocado mamparas transparentes en uno de los laboratorios para poder dar clase sin exponerse a posibles contagios y hemos convertido el Atelier en un nuevo comedor para Primaria y así esponjar un poco el número de alumnos en los otros dos comedores. Así y todo, hemos alargado los turnos de comedor para poder dejar espacios entre grupos estables y poder seguir la trazabilidad.
También hemos organizado diferentes turnos de recreo para distribuir a los alumnos de cada sección en los diferentes espacios del jardín sin que puedan mezclarse con alumnos de otros grupos.
Para las entradas de los alumnos, hemos querido facilitar la conciliación de las familias y en vez de optar por la entrada escalonada en diferentes horarios, hemos creado nuevas puertas de acceso, consiguiendo que los alumnos del colegio tengan 7 puntos de acceso diferentes desde la calle. Así los 1.900 alumnos del Sagrado Corazón pueden entrar por las mañanas en una franja de un cuarto de hora-20 minutos de diferencia, como máximo.
Para facilitar la circulación fluida por el centro, hemos señalizado todos los espacios con vinilos en el suelo poniendo huellas de dos colores que indican el sentido de la marcha para evitar cruces de alumnos, hemos colgado carteles con consejos de prevención y hemos instalado dispensadores de gel en todas las estancias, papeleras con tapa y pedal, etc. Además, en cada acceso hacemos un control de temperatura.
En las reuniones con familias, también hemos apostado por la presencialidad, pero en grupos reducidos de menos de 10 personas en varios turnos por clase. Para ello hemos adaptado el formato de la reunión y una parte más institucional se ha enviado por video a todas las familias que han acudido directamente a conocer a la profesora en la clase bajo control riguroso de asistencia en cada turno.
Todos estos cambios o adaptaciones pretenden facilitar la buena marcha del curso y son por el bien de todos. Pero no pretenden alterar para nada nuestro buen ambiente en la comunidad educativa, nuestro “fem familia” de siempre. Queremos seguir enseñando y aprendiendo juntos como siempre, disfrutando en el colegio, pero manteniéndonos sanos y seguros.
Feliz curso a todos!!!